Cría Blaptica dubia, cucaracha argentina
Cría Blaptica dubia, cucaracha argentina
A diferencia de los grillos, criar Blaptica dubia, conocida habitualmente como cucaracha argentina es muy poco laborioso. Como todo cultivo, requiere de una atención continuada sobretodo en lo que respecta a alimentación e higiene. Prevalecen las ventajas respecto a otros cultivos empezando por el hecho de no tener que separar ni puestas ni ejemplares. Un solo recipiente para todo el cultivo!
Se trata de una cucaracha que alcanza hasta los 45mm naciendo con tan solo 2-3mm. Esto para empezar ya nos da una idea de lo versátil que puede resultar como alimento para todo tipo de insectívoros, sea cual sea su talla. Para colmo a efectos nutricionales es un alimento equilibrado (Más que los grillos) al contener una relación proteína-grasa muy saludable. Lo mismo ocurre con la proporción Calcio/Fósforo.
Ventajas
La comprensible reticencia a mantener cucarachas en casa se ve atenuada en este caso por varios motivos:
-Un cultivo cuidado de blapticas no huele.
-No trepan por superficies lisas ya sean plástico o vidrio. (La silicona de los acuarios si, ojo)
-Tan solo los machos poseen alas funcionales pero no vuelan más allá de unos 10-15Cm.
-No emiten sonidos aunque se las puede oír removiendo pienso.
-No pueden reproducirse por debajo de los 20ºC. Bajar en invierno de esta temperatura en casa detiene su reproducción y desarrollo. Esto en caso de escapes, detiene la plaga aunque no la elimine, cuidado.
Inconvenientes
Vaya, todo ventajas? Sospechoso…
-No todo son ventajas, el principal inconveniente es que para alcanzar unos 40mm necesitará cinco o seis meses. Por tanto ya podemos afirmar que es un cultivo lento, de ahí que su precio se mantenga invariable pese a los bajos costos de producción (Salvo calefacción, claro).
-Ya tenemos otro inconveniente, han de mantenerse climatizadas en torno a unos 24-32ºC, algo fácil de hacer en una casa con terrarios manteniendo simplemente el cultivo sobre uno de estos.
-Otro inconveniente es la facilidad con la que aplanan su cuerpo para colarse por fisuras sorprendentemente estrechas. Algo que evitaremos si no pueden acceder a ellas gracias a las paredes de plástico o vidrio pero a tener en cuenta a la hora de alimentar terrarios: Siempre dentro de un recipiente de unos centímetros de pared lisa.
Alimentación
Son omnívoras, comen de todo. Lo más práctico y económico es recurrir a aquello que nos sobra y suministrarlo separadamente:
-Vegetales: Todo tipo de vegetales y sus restos ya pelados y bien lavados en cantidad justa para ser repuestos a diario o cada dos días.
No debe quedar nada. Ajustarlo es cuestión de práctica. De este modo no necesitarán bebedero lo que garantiza tener la humedad relativa del cultivo controlada, principal motivo de olores, ácaros, hongos y demás desastres. La HR debe rondar entre el 50 y el 60%.
-Piensos y cereales: Desde piensos caducados de pollo, perro, gato… hasta salvado de trigo, aquellas galletas pasadas, pan duro… Lo mismo, en pequeñas proporciones para mantener el alimento el mínimo tiempo dentro del cultivo.
Montaje cultivo Blaptica dubia
Voy a ser breve porque no tiene mucha historia, por no decir ninguna. Necesitamos un recipiente plástico tipo caja de ordenación con su tapa y de unas proporciones lo más altas que sea posible. Las hueveras de cartón más comunes en España hacen 30×30 Cm + 5Cm hasta la tapa. Las paredes deben ser verticales y sin rugosidades, bien lisas.
Para hacer la ventilación, podemos taladrar multitud de agujeros en la tapa o calentar un clavo en el fuego cogido con unos alicates e ir fundiendo el plástico pero quedará feo, feo.
También podemos cortar un agujero para pegar después una malla fina. Para cortar el polipropileno (PP) a veces basta con un cúter. Para hacerlo con sierra caladora hay que taladrar primero, usar hoja de metal nueva y acertar con las revoluciones, delicado. Los más exigentes recurren a una Dremel con herramienta adecuada que puede ser disco de corte o fresa. Tengo una y paso de complicarme la vida para ventilar cucarachas… Taladro al canto:
Con un poco de paciencia, broca de metal y muy bajas revoluciones, no se calienta el plástico y por tanto no se pega. Tal vez sean pocos pero quiero que retenga el máximo de calor, eso dispara tanto el crecimiento como la cría pero aumenta también la humedad, cuidado. Si se humedece, toca limpieza y más agujeros. Hay quien pega papel cuadriculado antes de taladrar para que queden alineados. La vida es demasiado corta…:
Ha de quedar tal que así. Ya hemos acabado el brico en lo que a plástico respecta (Agotador…):
Y de hecho, esto ya está casi listo. Pasamos al cartón. Usaremos el omnipresente cartón de huevos o huevera que proporciona multitud de escondrijos con gran superficie en un pequeño volumen. Es absorbente y hasta alimenticio. Hay que cortar las hueveras a la medida del recipiente para ser dispuestas verticalmente o en diagonal de manera que queden a unos 4-5 Cm de la tapa:
Esto lo hacemos para que los excrementos caigan al suelo, tengan zonas oscuras y se sientan seguras sin riesgo de aplastamiento o apilado de los cartones, simplemente. Dejaos de tijeras, deformaremos los cartones. Lo mejor es un cúter nuevo y haber dejado el cartón al sol para secarlo completamente.
Colocamos los cartones, aquí oblicuos y no verticales pues la caja no es todo lo alta que se recomienda. Dos comederos, uno para la verdura y el otro para el grano o derivados y pienso que deberán renovarse máximo cada dos días. Cuando le pillemos el punto a nuestra población añadiremos lo necesario para que al día siguiente no quede ni rastro. Es lo suyo:
Mantenimiento del cultivo de cucaracha argentina
Ya está? No. Lo que no se suele explicar en estos cultivos es lo necesario que resulta tener un contenedor gemelo que no hace falta taladrar. Si, otra caja idéntica a esta porque claro, cada cierto tiempo que variará según la población y el cuidado a la hora de alimentar deben cambiarse los cartones y limpiar el fondo. Sobretodo si el cartón ha cogido humedad, esto es importante.
Las cucarachas argentinas son fotófobas, odian la luz. Ponemos a pleno sol un contenedor al lado del otro. Destapamos ambos. Golpeamos un poco con los dedos el que contiene el cultivo. Las cucarachas se parapetan en el cartón. Sacamos delicadamente las hueveras una a una y las ponemos en el otro recipiente de reserva ya limpio.
Cuando tengamos todos los cartones cambiados de caja, cribaremos con un cedazo, colador de acero o malla toda la suciedad mientras retiene las diminutas crías que pasaremos también al nuevo. Una malla de 2.5-3 mm# ya funcionará si no hay restos de pienso o vegetales secos.
Es el momento de sacudir todos los cartones casi violentamente y sin chafar los bichos dentro de la caja limpia para que caigan las cucarachas y extraerlos. Ya podemos colocar las hueveras nuevas y el alimento y tendremos vía libre para limpiar el usado. Se tarda menos en hacer que en explicarlo…
Un buen lugar para mantener un cultivo aunque aquí quizás demasiado expuesto a la luz, es sobre un terrario. Podemos forrar exteriormente las cajas con cartulina, Aironfix, Etc… A la izquierda, mantenimiento de grillos y a la derecha, criadero de cucarachas argentinas. El calor del techo del terrario contribuye a ascender la temperatura y secar el ambiente del interior de los recipientes en zonas o épocas frías:
Otro modo de mantener calientes los cultivos es depositando el recipiente sobre una esterilla térmica de terrario. Con un termómetro podremos visualizar la temperatura y a partir de ahí propiciaremos más o menos superficie de contacto con la esterilla. Si las temperaturas de la sala son variables, termostato.
Cultivo de blapticas climatizado
Me he encontrado con problemas de abastecimiento de alimento vivo en mi zona probablemente derivados de la alerta sanitaria por coronavirus. Me resultaba muy cómodo acercarme a la tienda de vez en cuando y cargar para varias semanas, motivo por el que tan solo había previsto un pequeño cultivo para pequeñas contingencias (No vivo en la ciudad). Las circunstancias me han declinado por el autoabastecimiento, algo a lo que renuncié hacía veinte años cuando dejé el oficio…
Vamos a montar lo mismo pero con un volumen de 140 l. y con la dificultad añadida de que no cabe sobre un terrario: Hay que climatizar.
El principio es el mismo, un contenedor plástico de cierto tamaño, 140 l. Naturalmente reutilizado, más concretamente encontrado junto a un contenedor de basura. Tapa rota por varios sitios e irreparable:
Primer problema: Lleva unas respiraciones laterales en unas asas que debemos cerrar para evitar accidentes. Como decíamos, las ninfas nacen con unos milímetros de talla. Un tramo de manguera de butano simplemente por tener el calibre adecuado y silicona. Cuidado: La silicona convencional o «multiuso» no adhiere al polipropileno (PP). No cometáis el mismo error que yo y usad directamente silicona térmica de esa que se aplica con una pistola eléctrica:
Lo mismo con los pasos de los ejes de las ruedas de la base. Podrían haber puesto unas pinzas en la cavidad externa pero no, ocho agujeros que hay que tapar:
Llega la parte divertida. Hay que hacer una tapa que deberá tener ventilación y ajustar perfectamente. No puedo ir a comprar madera porque todo está cerrado por decreto. Le doy vueltas al tema y arranco los paneles aislantes de poliestireno extruido que tenía pegados en la pared tras las baterías de acuarios que ahora no uso. Ponemos encima de un panel la caja boca abajo, repasamos con un bolígrafo el perímetro y cortamos con un cúter con mucho cuidado de que no se nos incline al bies es decir, que el corte sea perpendicular a 90º:
Esto se consigue haciendo diversas pasadas de poca profundidad. No hace falta regle. Mantener la hoja bastante horizontal en la primera pasada, luego ya podremos pasarla a 45º y el primer corte nos hará de guía, doblando un poco eso si, la cuchilla. La cosa ha quedado así tras acabar de «pulir» con el cúter:
Cortamos dos listones y los presentamos sobre la caja para marcar la curvatura de los extremos:
Por el mismo procedimiento, hacemos el agujero central y presentamos la tapa en su lugar:
Pasando el brazo por el agujero, marcamos con bolígrafo o rotulador el perímetro interno sobre la tapa. Ya tenemos la posición de las dos piezas que harán el encaje de la tapa que ya habíamos fabricado. Esto es bastante curioso: Encolamos con pegamento multiuso transparente, ese que apesta y lo atornillamos suavemente y a mano hasta que cueste apretar con los dedos. Con más suavidad todavía acabamos de apretar con destornillador, funciona:
Y ahora encolamos también con pegamento transparente la rejilla mosquitera plástica. Una vez pegada, clavamos grampillones (Si, con los dedos) y tensamos hasta que quede firme y tensa. Una vez seco el pegamento podemos retirar tanto tornillos como grampillones: Hay que reutilizar! 🙂
Y pasamos ya al aislamiento. Este piso es muy frío en invierno y está mal aislado. No tiene sentido calentar durante el invierno mas que aquellas habitaciones en las que se hace vida. El gasto energético de mantener caliente el cultivo se va a reducir en un 50% como mínimo. Esto lo comprobé forrando acuarios en batería a lo largo de tres inviernos.
Vamos a hacer una caja de poliestireno extruido a la medida del recipiente. Le añadiremos 15 mm de altura interna para colocar la calefacción. Aquí no me voy a extender pues ya hemos explicado el corte y pegado. Unas fotos:
La última de las cuatro no se entiende y ahora lo veremos mejor. He querido proteger el poliestireno del contacto directo con el cable calefactor de silicona. Lo suyo es (Y será) una lámina de corcho decorativo pero ahora tan solo se pueden comprar alimentos, artículos de limpieza y medicinas. Un vidrio de una mesita de centro. Me está quedando el pisito majísimo! (Se nota que vivo solo?). Colocamos el cable, lo conectamos a un termostato y un termómetro para hacer las pruebas. El vidrio está centrado por listoncillos de poliestireno clavados y sin pegar, esto es provisional:
Y ya ponemos el cultivo en su lugar y acabamos de cerrar el perímetro (Esquinas) con fragmentos que coinciden con la tapa para que la cámara caliente quede lo más estanca posible. Aquí estaban sin pegar todavía y sin cortar el borde superior de la caja de poliestireno:
Este es el aspecto que presenta el tinglado ya cerrado aunque todavía por rematar (Me he tomado un descanso para editar esto):
Y al día siguiente me encuentro esto. Esperanzador…
Hemos visto como montar un criadero de blápticas. Lo hemos ampliado en tamaño. Lo hemos climatizado. Hemos gastado lo mínimo. Hemos aprendido a manejar el poliestireno extruido, un material frágil y ligero que resulta ser un aislante de primera. Hemos destrozado el aislamiento del cuarto de los acuarios. Nos hemos cargado una mesita de centro. Hemos dispersado fragmentos de corcho blanco por lugares de la casa que desconocíamos. Y lo hemos hecho para criar asquerosas cucarachas…
Cumple con los objetivos de un cultivo con clima controlado todo el año, condición necesaria para que se reproduzcan en abundancia y seguro frente a las fugas.
Este procedimiento de manipulación del poliestireno es muy útil para fabricar insectarios para fásmidos, mántidos, Etc… También para hacer incubadoras del tamaño y proporciones que queramos. Es frágil pero si se trata con cuidado puede resistir años. Puede forrarse con PVC espumado, Etc… pero resultará más caro que el aislante.
Ir a Manipulación del poliestireno extruido >
Ir a Alimento vivo >
Textos e infografías: RCG. Zootecnia doméstica. Der. Res.
Fotografías RCG: CCBYSA4.0